Soy transexual desde pequeña y desde jovencita me destacaba por tener un miembro considerable, sin embargo a mí me gustaban los miembros ajenos. Cuando cumplía mis 8 años, jugando con amiguitos, me hacía la payasa bajándome los pantalones y mostrando mi culo a los chicos. Todo era divertido hasta que llegó mi tio Omar y pegó un grito: "Pero qué carajo estás haciendo? Ya mismo te vas al baño, en penitencia, hasta que yo te permita volver a la fiesta". Me tomó del cabello con su mano enorme y me arrastró hasta el baño, me arrojó dentro y cerro la puerta con llave. Yo me sentía aburrida y me puse Przeczytaj więcej