Juegos
Hay una cosa que me encanta casi mas que el sexo inesperado, y son los juegos sexuales. Hace un tiempo que una compañera de trabajo y yo mantenemos una relacion especial. Tenemos mucha química y tonteamos un poco, al menos hacemos el trabajo algo mas divertido. Vamos juntas al baño, tomamos cafe, viene a mi a contarme cotilleos, y en todos esos momentos tenemos una complicidad especial.
Últimamente habiamos subido el tono, pequeños roces, enseñar un muslo de forma sensual en el baño, una mirada traviesa y varias formas de seduccion. Todo esto en una oficina de lo mas aburrida que solo se anima cuando hay que salir a hacer visitas. El caso es que tras unos dias de lo mas aburridos, me sentia algo juguetona y asi se lo dije a mi amiga. Empezó entonces una espiral de jueguecitos cada vez mas picantes. En una ocasión, yo me quité las braguitas y se las dejé en la mesa a mi amiga, en otra ella se comia un platano de forma erotica en su mesa para que yo lo viera. En otra, nos mandabamos mensajes guarros por el movil y teniamos que ver quien se mojaba antes las braguitas. La ultima se le ocurrió a ella. Un dia me dijo:" vamos a hacer un juego mas divertido, que te veo aburrida en tu mesa". Y me llevó al baño.
Una vez alli, entre risas, nos metimos en uno de los cubículos. Me bajó el pantalón y entre risas y sorpresa me bajó las braguitas. Con un sonrisa picara sacó del bolso un aparatito vibrador. Yo le dije que no me iba a meter eso, pero ella me comentó que era un vibrador especial, que se introducia en la vagina y que vibraba cuando otra persona le daba a un boton de intensidad con el movil. Si me atrevia a jugar, lo llevaria media mañana introducido y cuando mi amiga quisiera lo encenderia. La sensacion de morbo aumentó, pensar que quedaba en manos de ella me excitó muchisimo, asi que acepté. Lo limpiamos y lubricamos bien y me lo introduje mientras ella me miraba con ojos excitados. Le enseñe como me quedaba dentro y de nuevo me subi las braguitas. El juego habia comenzado.
Volví a mi mesa y me puse a hacer lo de siempre. Mi amiga me miraba continuamente y yo no podia parar de pensar en cuando lo iba a encender. Algunos compañeros nos miraban y pensarian vaya dos locas. Pero ella supo esperar y el caso es que al rato me olvidé mientras hablaba por telefono. En ese momento, sentí una vibración en mi vagina, en un principio flojito pero de repente subió y noté un pequeño fuego dentro de mi. Pegué un pequeño grito y me tape la boca sonrosada. De hecho, me puse roja. Menudo susto pero menudo subidón de placer. El compañero de la mesa de al lado se quedó mirando y me preguntó si estaba bien. Tuve que mentir pero mientras suspiraba, asi que se quedó mas extrañado aun. Al poco la vibración paró y pude terminar la conversación del telefono. Me levanté a la mesa de mi amiga y le dije:"menudo susto, no lo hagas mas" pero ella se reia con ojos de lujuria y me dije que ahora empezaba la fiesta y que poco a poco iria subienso la intensidad, y que me dejara llevar. Yo me preocupé un poco y decidí irme al baño a quitarmelo pero ella se rió y me sañaló al jefe que entraba en la sala en ese momento. Me dijo:"lo acabo de encender porque empieza la reunion con los jefes de zona y tenemos que entrar a la sala de reuniones". Cual fue mi sorpresa que tuve que ir a mi mesa corriendo y preparar los papeles porque empezaba la reunion. Me la habia jugado porque ya no podia quitarmelo. Estaba en sus manos.
Entramos todos en la sala, incluidas las dos. Varios hombre y varias mujeres repartidos en una mesa grande. Yo estaba preocupada y no podia centrarme mirando a mi amiga con ojos de "por favor no lo hagas". Pero vaya que sí lo hizo. Al poco de comenzar la reunión, empezó a vibrar y mi vagina se contrajo. Tuve que disimular apretando los muslos y cerrando las piernas. A un lado habia una mujer y al otro un hombre. Yo estaba nerviosa para que no lo notaran, por mi agitación y por el pequeño ruido de la vibración. Poco a poco me fui agitando pero de repente cesó. Mi amiga se reía por dentro con una mirada de mala. Yo pude reponerme un poco pero seguia nerviosa.
Al rato, uno de los jefes me preguntó sobre un tema y me puse a hablar. Entonces, comenzó a vibrar de nuevo, tuve que hacer una pausa y coger aire, la sensacion de ardor y placer en mi vagina era indescriptible pero tenía que acutar como si nada. Poco a poco subió la intensidad y noté como mojaba las braguitas pero tenia que seguir hablando, y entre los nervios, el placer y la vibración me levanté y me puse a andar por la sala mientras hablaba. Al mover los muslos y al moverme el aparato cambió de posición y la intensidad con que me rozaba en las paredes fue mayor, sintiendo como me vibraba el clitorix. Entonces tuve que apoyarme en la pared y empecé a tropezar palabras pero pude terminar y sentarme justo cuando paró. Entonces pensé que habia salvado la situación pero que mi amiga tenia que parar.
Entonces, otro compañero se puso de pie y empezó a exponer. De nuevo mi amiga le dio al botón y aquello comenzó otra vez. Yo apretaba los muslos como podía, sintiendo como mis braguitas estaban mojadas por mi flujo y tapando mi boca con mis manos. La lujuria subía por mi vientre y empecé a mirar el paquete al hombre que exponía. Si hubiera podido le hubiera bajado el pantalon alli mismo y se la hubiera sacado. Sentí un deseo enorme, que alguien me bajara las braguitas y me lamiera o me penetrara era lo unico en que podia pensar. Entonces, volvió a parar.
No podia más, ella alternaba encendido y apagados, cada vez con mas intensidad, y yo me moría de ganas de que volviera a encenderlo o de que lo apagara.Tenia una mezcla de excitación y verguenza. En ese momento, mia amiga me miro con ojos pícaros y me hizo una señal hacia arriba, entonces entendí que lo iba a poner a tope. Me agarré a la silla con fuerza, crucé las piernas apretando los muslos y aquello comenzó de nuevo. Poco a poco vibraba con mas fuerza, mientras mis paredes vaginales de adaptaban al movimiento y lubricaba sin parar. Cada vez mas y cada vez el fuego subia hacia arriba, cada vez mas y mas fuerte. La chica de al lado me preguntó si me encontraba bien y tuve que decir que estaba algo mareada y que no aguantaba, así que me ayudó a levantarme y se excusó por mi porque yo ya no podia ni hablar. Al llegar al baño le dije que podia yo sola y en ese momento llegó el climax mas fuerte que habia tenido en años, moje hasta el pantalon y tuve que agarrarme a su brazo lanzando un suspiro y tapandome la boca para no emitir un grito. Mientras mi cuerpo se doblaba pero pude reponerme y entré sola al baño tras disculparme de nuevo.
Ya sola en el baño pude dar un suspiro grande y relajarme un poco. Me tuve que echar agua en la cara, estaba en shock del placer tan fuerte que había tenido. Al bajarme las braguitas estaban empapadas y aun tenia los labios vaginales latiendo de la excitación. Me senté en el vater con todo bajado y me saqué el aparatito. Aquello fue una tortura placentera.
Antes de salir, me quité las braguitas mojadas y las dejé junto con el aparatito en el cajon de la mesa de mi amiga. Volví a la reunión ya relajada y me disculpé varias veces. Mi amiga se partía de risa. Cuando salimos me fuí a mi mesa y ella a la suya. Me llamó al telefono y me preguntó si lo llevaba. Yo le dije que si y que le diera al botón. Al encenderlo vibró el cajón de su mesa, ella lo abrió y se rio al verlo alli. Agarró las braguitas, me miró y las olió profundamente, entonces me dijo:"has disfrutado mucho". Y yo le dije: "cuando repetimos?".
Últimamente habiamos subido el tono, pequeños roces, enseñar un muslo de forma sensual en el baño, una mirada traviesa y varias formas de seduccion. Todo esto en una oficina de lo mas aburrida que solo se anima cuando hay que salir a hacer visitas. El caso es que tras unos dias de lo mas aburridos, me sentia algo juguetona y asi se lo dije a mi amiga. Empezó entonces una espiral de jueguecitos cada vez mas picantes. En una ocasión, yo me quité las braguitas y se las dejé en la mesa a mi amiga, en otra ella se comia un platano de forma erotica en su mesa para que yo lo viera. En otra, nos mandabamos mensajes guarros por el movil y teniamos que ver quien se mojaba antes las braguitas. La ultima se le ocurrió a ella. Un dia me dijo:" vamos a hacer un juego mas divertido, que te veo aburrida en tu mesa". Y me llevó al baño.
Una vez alli, entre risas, nos metimos en uno de los cubículos. Me bajó el pantalón y entre risas y sorpresa me bajó las braguitas. Con un sonrisa picara sacó del bolso un aparatito vibrador. Yo le dije que no me iba a meter eso, pero ella me comentó que era un vibrador especial, que se introducia en la vagina y que vibraba cuando otra persona le daba a un boton de intensidad con el movil. Si me atrevia a jugar, lo llevaria media mañana introducido y cuando mi amiga quisiera lo encenderia. La sensacion de morbo aumentó, pensar que quedaba en manos de ella me excitó muchisimo, asi que acepté. Lo limpiamos y lubricamos bien y me lo introduje mientras ella me miraba con ojos excitados. Le enseñe como me quedaba dentro y de nuevo me subi las braguitas. El juego habia comenzado.
Volví a mi mesa y me puse a hacer lo de siempre. Mi amiga me miraba continuamente y yo no podia parar de pensar en cuando lo iba a encender. Algunos compañeros nos miraban y pensarian vaya dos locas. Pero ella supo esperar y el caso es que al rato me olvidé mientras hablaba por telefono. En ese momento, sentí una vibración en mi vagina, en un principio flojito pero de repente subió y noté un pequeño fuego dentro de mi. Pegué un pequeño grito y me tape la boca sonrosada. De hecho, me puse roja. Menudo susto pero menudo subidón de placer. El compañero de la mesa de al lado se quedó mirando y me preguntó si estaba bien. Tuve que mentir pero mientras suspiraba, asi que se quedó mas extrañado aun. Al poco la vibración paró y pude terminar la conversación del telefono. Me levanté a la mesa de mi amiga y le dije:"menudo susto, no lo hagas mas" pero ella se reia con ojos de lujuria y me dije que ahora empezaba la fiesta y que poco a poco iria subienso la intensidad, y que me dejara llevar. Yo me preocupé un poco y decidí irme al baño a quitarmelo pero ella se rió y me sañaló al jefe que entraba en la sala en ese momento. Me dijo:"lo acabo de encender porque empieza la reunion con los jefes de zona y tenemos que entrar a la sala de reuniones". Cual fue mi sorpresa que tuve que ir a mi mesa corriendo y preparar los papeles porque empezaba la reunion. Me la habia jugado porque ya no podia quitarmelo. Estaba en sus manos.
Entramos todos en la sala, incluidas las dos. Varios hombre y varias mujeres repartidos en una mesa grande. Yo estaba preocupada y no podia centrarme mirando a mi amiga con ojos de "por favor no lo hagas". Pero vaya que sí lo hizo. Al poco de comenzar la reunión, empezó a vibrar y mi vagina se contrajo. Tuve que disimular apretando los muslos y cerrando las piernas. A un lado habia una mujer y al otro un hombre. Yo estaba nerviosa para que no lo notaran, por mi agitación y por el pequeño ruido de la vibración. Poco a poco me fui agitando pero de repente cesó. Mi amiga se reía por dentro con una mirada de mala. Yo pude reponerme un poco pero seguia nerviosa.
Al rato, uno de los jefes me preguntó sobre un tema y me puse a hablar. Entonces, comenzó a vibrar de nuevo, tuve que hacer una pausa y coger aire, la sensacion de ardor y placer en mi vagina era indescriptible pero tenía que acutar como si nada. Poco a poco subió la intensidad y noté como mojaba las braguitas pero tenia que seguir hablando, y entre los nervios, el placer y la vibración me levanté y me puse a andar por la sala mientras hablaba. Al mover los muslos y al moverme el aparato cambió de posición y la intensidad con que me rozaba en las paredes fue mayor, sintiendo como me vibraba el clitorix. Entonces tuve que apoyarme en la pared y empecé a tropezar palabras pero pude terminar y sentarme justo cuando paró. Entonces pensé que habia salvado la situación pero que mi amiga tenia que parar.
Entonces, otro compañero se puso de pie y empezó a exponer. De nuevo mi amiga le dio al botón y aquello comenzó otra vez. Yo apretaba los muslos como podía, sintiendo como mis braguitas estaban mojadas por mi flujo y tapando mi boca con mis manos. La lujuria subía por mi vientre y empecé a mirar el paquete al hombre que exponía. Si hubiera podido le hubiera bajado el pantalon alli mismo y se la hubiera sacado. Sentí un deseo enorme, que alguien me bajara las braguitas y me lamiera o me penetrara era lo unico en que podia pensar. Entonces, volvió a parar.
No podia más, ella alternaba encendido y apagados, cada vez con mas intensidad, y yo me moría de ganas de que volviera a encenderlo o de que lo apagara.Tenia una mezcla de excitación y verguenza. En ese momento, mia amiga me miro con ojos pícaros y me hizo una señal hacia arriba, entonces entendí que lo iba a poner a tope. Me agarré a la silla con fuerza, crucé las piernas apretando los muslos y aquello comenzó de nuevo. Poco a poco vibraba con mas fuerza, mientras mis paredes vaginales de adaptaban al movimiento y lubricaba sin parar. Cada vez mas y cada vez el fuego subia hacia arriba, cada vez mas y mas fuerte. La chica de al lado me preguntó si me encontraba bien y tuve que decir que estaba algo mareada y que no aguantaba, así que me ayudó a levantarme y se excusó por mi porque yo ya no podia ni hablar. Al llegar al baño le dije que podia yo sola y en ese momento llegó el climax mas fuerte que habia tenido en años, moje hasta el pantalon y tuve que agarrarme a su brazo lanzando un suspiro y tapandome la boca para no emitir un grito. Mientras mi cuerpo se doblaba pero pude reponerme y entré sola al baño tras disculparme de nuevo.
Ya sola en el baño pude dar un suspiro grande y relajarme un poco. Me tuve que echar agua en la cara, estaba en shock del placer tan fuerte que había tenido. Al bajarme las braguitas estaban empapadas y aun tenia los labios vaginales latiendo de la excitación. Me senté en el vater con todo bajado y me saqué el aparatito. Aquello fue una tortura placentera.
Antes de salir, me quité las braguitas mojadas y las dejé junto con el aparatito en el cajon de la mesa de mi amiga. Volví a la reunión ya relajada y me disculpé varias veces. Mi amiga se partía de risa. Cuando salimos me fuí a mi mesa y ella a la suya. Me llamó al telefono y me preguntó si lo llevaba. Yo le dije que si y que le diera al botón. Al encenderlo vibró el cajón de su mesa, ella lo abrió y se rio al verlo alli. Agarró las braguitas, me miró y las olió profundamente, entonces me dijo:"has disfrutado mucho". Y yo le dije: "cuando repetimos?".
3 years ago
