Me masturbo... y qué?

La mujer también se masturba.
Desde la pubertad, desde que empieza a sentirse mujer.
Se despierta excitada, con sus hormonas inquietas…

La mujer mira pornografía y se le humedece la entrepierna.
A veces necesita un orgasmo para relajarse.
Para aliviar el dolor de cabeza. Para poder descansar mejor.
O simplemente porque le gusta tener un orgasmo...

La mujer también se fija en el cuerpo masculino.
Regodearse mirando algunas partes la excitan sobremanera.
A alguna le gusta los glúteos redondos de un hombre cuando se aleja.
A otra le excita el torso ancho, el cuerpo velludo, el olor a macho...

La mujer también adora recibir buen sexo oral.
No le gusta quedarse solamente con sus propios dedos.
Aunque a veces sus propios dedos son una excelente opción.
Nadie sabe mejor que ella misma, lo que necesita.

La mujer necesita coger y le gusta que la cojan bien.

La mujer también se toca en el baño imaginando situaciones excitantes.
Porque la mujer se excita involuntariamente, de manera incontrolable.
A veces moja su ropa interior solo escuchando unas pocas palabras.
No necesita mucho más que eso; todo está en su mente.

La mujer tiene la misma intensidad sexual que el hombre.
Lo único que cambia es que sus múltiples orgasmos le permiten disfrutar del sexo con más intensidad, con más libertad, con más deseo….